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12:29 p.m. - 2003-10-01 Entonces este diario es algo as� como: ven te invito a mi casa, a mi habitaci�n, a instalar en este espacio cerrado ventanas y puertas, te presto las llaves de las puertas, como si los cajones de mi mente tuvieran puentes o fueran de cristal transparente. Supongamos. O quiz�s s�lo deje las puertas abiertas a mis ensue�os. Tendr�s que salir de tu casa o habitaci�n y venir. Quiz�s encuentres objetos, fotos, im�genes, que tambi�n encuentras en tu habitaci�n. Con seguridad s� que tengo objetos que he buscado en los rincones de mi habitaci�n, entes que de vez en cuando aparecen pero como una sombra instantanea vuelven a desaparecer. �El tiempo no anima ya a la memoria...! Leyendo para que lo leas:La po�tica del espacio, de Gaston Bachelard. FCE. Etc.
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