11:17 p.m. - 2008-06-29 Nos hacemos bien
Al leer sus emails a lo largo de estos nueves meses, puedo ver la transformación. Casi oler y sentir la mortalidad del capullo recién abierto. Aspiramos a ser mejores todavía. ¡Jos! Sin necesidad de artilugios, no alcohol, no drogas, no manipulaciones, no promesas rotas, no contradicciones, no dudas. ¿Puedo pedir un amor más sano? Sí, todavía hay más. Pero el camino es el correcto. Bueno y constante. En definitiva, yo le hago bien a ella. Ella me hace bien a mí.